Pues nada mejor que empezar los posts de este nuevo año 2020 que con una propuesta sana, fresca, económica y de una calidad extrema. Así es A Pluma la propuesta del chef Eugeni de Diego (exBulli) que completa una oferta poco tratada al nivel que se merece y tan habitual como es el mundo del pollo y sus variedades.
Ya tiene 3 abiertos en BCN
No siempre los “Pollos a L’ast” que todos alguna vez hemos pedido los domingos han cumplido con las expectativas que todo buen ave debe cumplir. En A Pluma es su principal objetivo. Un horno Josper a 160 grados dónde los pollos dan vueltas “sin marearse” (como dice el chef). Buena materia prima (pollos de poco más de un kilo) con una emulsión de vino, hierbas, limón y ajo dan al producto su mejor toque. Buenísimo en cualquiera de sus especialidades. Completa la oferta la ensalada de tomate, una buena escalivada, un canelón de pollo, manzana y foie excelente, alitas y croquetas. Nada más…
Sus 3 locales revientan ya sus asientos, en locales pequeños y dónde el qué supera el dónde, sin duda. Reinvención del pollo a l’ast, nuevas ganas de comer uno (sino el mejor) de los mejores pollos de la ciudad y una forma sana y económica de poder salir a comer con la família. Quedan ganas de probarlo en todas sus variedades (frito, con mole, con salsa de curry rojo) y siempre merece una segunda, tercera y sucesivas visitas.
Aceptan encargos (hechos con tiempo, eso sí) y a este paso poco tardarán en abrir más locales por toda la ciudad. Fórmula simple, éxito asegurado. Bravo por las buenas ideas y, sobretodo, el trabajo bien hecho.
A PLUMA, BARCELONA
What could be better than kicking off our 2020 posts with a fresh, healthy and economical option with extremely high quality? That perfectly describes A Pluma, the latest offering from Chef Eugeni de Diego (formerly of el Bulli), now exploring an area so common and yet so rarely getting the treatment it deserves: chicken in all its varieties.
Now with three locations open in Barcelona
We’ve all ordered rotisserie chickens for a Sunday meal, and let’s be honest, they have not all lived up to our expectations. Indeed that is the main goal of A Pluma. With a Josper oven at 160 degrees in which the chickens turn “without getting dizzy” (in the words of the chef), good ingredients (chickens weighing just over a kilo), and an emulsion of wine, lemon and garlic, the product is at its best, and delicious any way it is served. Pair it with a tomato salad, a good escalivada(grilled and roasted vegetables), an excellent cannelloni of chicken, apple and foie, chicken wings and croquettes. And nothing more …
The three locations are already bursting at the seams with customers, in small spaces where the what is undoubtedly more important than the where. It’s a reinvention of rotisserie chicken, making us newly excited to eat one of (if not the) best chickens in the city and providing a cheap and healthy way to dine out as a family. I can’t wait to try all the varieties (fried, with mole sauce, in red curry) on a well-deserved second and third visit, and beyond.
They take orders (ahead of time) and at this rate they’ll soon be opening more locations all around the city. It’s a simple formula with guaranteed success. Bravo for the good ideas and especially for a job well done.