Sa Duna, Benicassim, Castellón de la Plana.

Arrancó su andadura hace unos años y se estableció como un “chiringuito de playa” dónde comer bien, muy bien. El paso de los años en Sa Duna, desaceleró un poco la progresión gastronómica del lugar, convirtiéndose en una parada meramente para picar algo. Los cócteles que antaño ocuparon la parte trasera del local, excelentemente tocados y la vertiente creativa de Carlos Tortajada y Fernando Mas, sus artífices se diluyó lamentablemente para todos los que disfrutábamos en su terraza. Pero la cosa está cambiando. La prueba del ¿quizás futuro menú? del lugar de hace unos días, en manos del nuevo cocinero Carlos Mas, bajo las órdenes de Tortajada, director creativo, hizo renacer nuestras esperanzas.

Un correcto salmorejo de entrante con los imprescindibles boquerones dan inicio al menú, compuesto por unas crujientes y nada oleosas ortiguillas de mar con base de crema de espinacas, un ceviche de gambas quizás un pelín demasiado avinagrado y unas croquetas “mar i montanya” de gambas y carne agradecidas. El guisado de escórpora (escorpa en valenciano) con patatas recuerda a los mejores guisos marineros del lugar y el arroz con cigalas sale en el punto perfecto de cocción, sin más florituras. El menú lo remata un delicioso bogavante con patatas fritas al momento tipo chips y huevos, una de los mejores platos que nos prometen que volverá a la futura carta del lugar.

Quedan matices a mejorar, puntos en los que llegar a la excelencia, pero se convierte en una buena opción para comer a pie de playa con vistas a recuperar un imprescindible en la zona.


It opened a few years ago as a beach bar with great food, but the passing years have seen a slight slowdown in the culinary evolution of Sa Duna making it merely a place to stop for a bite to eat. The cocktails that used to be excellently prepared in the back, fruit of the creative minds of barmen Carlos Tortajada and Fernando Mas, have unfortunately lost their potency, according to many patrons. But change is afoot. The recent test of a rebooted menu by the new chef Carlos Mas, acting under orders from creative director Tortajada, has raised our hopes.

A spot-on salmorejo amuse-bouche with the quintessential anchovies lead off the set lunch menu, comprised of crunchy and greaseless sea anemones over creamed spinach, a prawn ceviche with perhaps a bit too much vinegar, and wonderful “surf and turf” croquettes made from prawn and meat. The red scorpionfish stew with potatoes (the fish is called “escorpa” in Valencian) recalls the best local seafood stews, and the rice with crayfish comes perfectly cooked with no frills. The meal is rounded off with a delicious lobster with fresh chips, an excellent dish that they promise to include on future menus.

There are some points that need improvement and stand shy of true excellence, but it has become a good option for lunch on the beach, with a strong chance of reclaiming its status as a local.