1 Sol Repsol. Justo al lado se ubica Terzio, un local más informal y con la misma calidad.
Hay lugares de esos que son para quedarse. Comer pausadamente, disfrutar de una excelente y seleccionada cocina de mercado. Y saborear los pequeños momentos…Y no tardar en volver…
Todo en @treze_restaurante logra esa sensación de maravillosa comodidad y holgura. Un sitio que gusta por su oferta gastronómica y, fundamental, por su magnífico y experimentado equipo de sala y cocina. Fantásticos en trato y recomendaciones.
Una cena con buenos amigos sirve de arranque para degustar las propuestas del discreto y prometedor @sanzsaul, un chef que no necesita focos, distinciones ni prime times televisivos para destacar desde la sincera y buenísima cocina de su restaurante.
Lo hace bien. Muy bien. Absolutamente geniales los torreznos. No os los perdáis como arranque. Hay propuestas reveladoras, diferentes y deliciosas. Buenísimas las croquetas y en su punto las alcachofas confitadas y ligeramente ahumadas. Fuera de carta nos recomiendan la penca con pil pil…¡un acierto!
Destaca el lugar (un tipo de propuestas que no son comunes a muchos sitios) por sus platos de caza…¿Os he dicho alguna vez que me encantan los platos de caza?…Y sorprenden por su ligereza y buen hacer. Lo constatamos esa noche con el pichón asado con gyozas. Espectacular. Nos reservamos para una próxima visita el guiso de morro de ternera y manita de cerdo con oreja crujiente, el steak tartar o los escabeches…
Buena carta de vinos en una cena que termina sin parte dulce pero que en próximas visitas, sin duda, tendrá remates entre su tarta de queso, el hojaldre con crema de praliné de avellanas o las peras con crema de tomillo y helado de lavanda…
Curiosamente a escasos metros de la casa madre se erige @terzio_bar, una propuesta más informal y canalla que comparte algunos platillos pero ofrece bocadillos de autor, alitas de pollo, bravas o callos entre su apetitosa oferta. ¡Ah! Y es dónde a partir de ahora se ofrece el famosísimo menú a menos de 15€ que se disputan los muchos que ya conocen su destacada propuesta.
Lo dicho. Fue salir de la cena y saber que no tardaría en volver. Que deseaba ya tener una nueva oportunidad para compartir una de sus mesas con una de las mejores relaciones calidad-precio de la ciudad. Abierto todos los días de la semana. ¡Anotadlo! Y ya me contaréis…
1 Repsol Sun. It’s right next door to Terzio, a more informal restaurant with the same quality.
There are places you never want to leave. You eat slowly and enjoy excellent and well-selected market cuisine, and savor the small moments. Then you return as soon as you can.
Everything at Treze (@treze_restaurante) achieves that feeling of wonderful comfort and ease. It’s loved for its food, and, fundamentally, for its excellent and experienced team in the kitchen and the dining room, who are fantastic in their service and recommendations.
Dinner with close friends was our impetus to try the creations of the discreet and promising Saul Sanz (@sanzsaul), a chef who needs no spotlights, distinctions, or prime-time television appearances to stand out with his sincere and wonderful food.
He does it well. Very well. The fried pork rinds (“torreznos”) are absolutely brilliant. They’re an absolute must to start the meal. The menu is revelatory, different, and delicious. The croquettes are great and the artichoke confit is perfectly cooked and lightly smoked. Upon recommendation, we ordered the off-menu perch with pil-pil sauce and were happy we did.
The restaurant is known for its game dishes (something you don’t find too often). Have I mentioned I love game dishes? These are surprisingly light and expertly prepared. On this occasion, we had the roasted squab with gyozas, which was spectacular. Other options like the beef cheek stew, the pork trotters with crispy pork ear, the steak tartare, and the escabeches will have to wait for future visits.
The wine list is good and our dinner ended without dessert, but we’ll be back to try the cheesecake, the puff pastry with hazelnut praline cream, and the pears with thyme cream and lavender ice cream.
Curiously, Terzio Bar (@terzio_bar) is located just a few meters away, offering a more informal and rascally option that shares some of the same menu items but also offers appetizing additions like signature sandwiches, chicken wings, “patatas bravas,” and tripe stew. Oh! And it will now be serving the famous set lunch menu for under €15 that fans are already clamoring for.
I said it at the top. I left the restaurant knowing I’d be back soon. I was already yearning for another opportunity to share one of the city’s best values at one of its tables. It’s open every day of the week. Take note! And let me know what you think.