Jose Manuel de Dios es el artífice, sin duda, del éxito de @labienaparecida, un restaurante en pleno apogeo y momento álgido en la capital. Pese a llevar abierto más de 3 años, ahora parece haber logrado su consolidación.
Cocina con toques cántabros
Con varias recomendaciones y muchos posts leídos nos dirigimos a comer a este céntrico restaurante, en la calle Jorge Juan. Para empezar, este es uno de los puntos a favor del lugar. En mi opinión es mucha mejor elección para almuerzo que para cena. Ideal para comidas en familia y encuentros de amigos o negocios. DIáfano, vanguardista, en tonos claros y maderas y con luz natural el restaurante ofrece una inmejorable ubicación y ambiente.
La croqueta de huevo y lacón simplemente insuperable. Única. Para repetir. La ensaladilla (de la que tanto habíamos oído hablar) está muy buena pero no llega al nivel de la de Carles Abellán en Barcelona (aún en el Top 1 de este plato para nuestra elección).
La carta ofrece varios entrantes y buenos pescados y carnes que cumplen las expectativas de un buen ágape. El steak tartar de nivel. Con un helado de mostaza acertado y delicioso y una cremosidad en la emulsión de la carne y los aderezos muy interesante. ¡¡Y con su buena ración de patatas paja!!. El arroz con pollo de corral alcanza un punto estupendo de melosidad y sabor, quizás un pelín demasiado presente el azafrán….
La tarta de queso excepcional. Para nosotros, superando la de Fismuler por su suavidad y delicadeza.
Un magnífico descubrimiento, un lugar al que volver cualquier día (para poder probar el resto de apetitosos y sugerentes platos de la carta) y al que sólo haría un pequeño apunte: el servicio. Sirven los platos sin recordar lo que son. Mención sin embargo al sumiller que nos aconseja y ayuda en la elección del vino así como en la degustación de un dulce final estupendo como cierre.
LA BIEN APARECIDA, Madrid
Jose Manuel de Dios is the artist, there’s no doubt, behind the success of @labienaparecida, a restaurant at the height of its fame and experiencing a crucial moment in the Spanish capital. Despite having been open for more than three years, it now seems to have found its stride.
Cuisine with Cantabrian touches
With various recommendations and having read a lot of posts, we head for a meal at this centric restaurant on calle Jorge Juan. For starters, this is one of the points in its favor. In my opinion, it’s a much better choice for lunch than for dinner. It’s ideal for meals with family or friends, as well as business lunches. Open and avant-garde, done up in light tones and wood with natural light, the restaurant offers an unbeatable location and ambience.
The egg and lacón(ham) croquette is truly unbeatable. Singular. Worth repeating. The ensaladilla (that we’ve heard so much about) is very good, but not on the level of Carles Abellán’s in Barcelona (still the Top 1 for this dish in our ranking).
The menu has a selection of various appetizers and good fish and meat dishes that meet any expectations for a good feast. The steak tartar is very good, served with a well-chosen and delicious mustard ice cream, a creaminess in the emulsion of the meat and very interesting garnishes — and with a good serving of shoestring potatoes!! The rice with free-range chicken has a wonderful point of creaminess and flavor, although the saffron might be slightly too present in the dish…
The cheesecake is exceptional. For us it’s even better than the one at Fismuler in terms of its softness and delicacy.
A magnificent discovery, a place to go back to any day (to try the rest of the appetizing and suggestive dishes on the menu) and about which I would only make one small note: the service. They serve the dishes without remembering what they are. Mention should be made, however, of the sommelier who helps and councils us in our choice of wine, as well as in the tasting of an amazing sweet wine at the end to round things off.