Ubicado en las caballerizas de un castillo del S.XVI

¡Abran paso a las nuevas generaciones!. Vicky Sevilla. Quédense con este nombre…. dará mucho que hablar.

La historia de Vicky es, como tantas, otra vida de superación, retos, esfuerzos y mucho camino hasta lograr cumplir un sueño. La juventud no resta pasión y los años suman en experiencia y saber hacer, sin duda.

Sagunto nos sorprende. Nunca antes habíamos caminado por sus empedradas callejuelas ni visto su extenso e impresionante castillo. Es una ciudad imponente, que conserva aún vestigios de un pasado romano y árabe.

En la calle que sube al Castillo, el lugar que encontró Vicky fue el ideal para emplazar su centro de despegue. Unas caballerizas que ha remodelado pero que mantienen la esencia, el frescor y la sobriedad de un lugar dónde, seguro, la experiencia será única.

Arrels restaurant ha obtenido su primer sol Repsol… El primer reconocimiento a la cocina de una joven chef que rompe con los cánones clásicos de ciudades pretéritas para apostar por una cocina valiente, que mira hacia el futuro y que logra aunar tradición y vanguardia. Sus versiones de platos clásicos reviven generaciones y permiten conocer aún más la preciosa tierra dónde se originan….

Los snacks aparecen limpios, delicados ante el comensal en un despliegue de madera y vajilla neutra, muy mimetizada con el entorno. Su versión del atún encebollado, la quisquilla de Santa Pola en crema de espárrago blanco o el cremoso de queso de Almedijar con tierra de almendras y pesto de rúcula abren el menú. Lo fantástico de Vicky es que no se queda con los matices primeros de esos productos sino que siempre añade pequeños “shots” de crujientes, ácidos, y contrastes que completan y celebran el plato en sí. “¡Por favor”! le pido, nunca retires el cremoso de queso del menú…¡¡qué delicia y que forma de salivar con esa mezcla untuosa y especiada!!

La flor de calabacín rompe, en mi opinión, la ligereza y fluidez del menú, prescindible. Pero recupera su ascensión con el jugo de pollo a L’ast con su crujiente y el curry de calamar y sepia bruta, que consigue un guiso con matices único e irrepetible.. La merluza se deshace entre el tenedor y en la boca, fresca y perfecta en cocción y la royal “d’espardenyà”(mezcla de anguila y pato) con foie y pistachos es el ejemplo perfecto de lo que dará que hablar esta joven chef….Perfecta, equilibrada, con el foie en forma de corona externa a la royal para rebajar intensidad y nuevamente los pistachos como punto crujiente y de contraste. Bravo

Los cítricos mandan en los postres, que cumplen y culminan un menú muy ajustado en precio para la calidad y extensión.

Vimos a Vicky en la gala de los soles Repsol, recogiendo rauda y ágil su galardón, con la premura de una juventud que no resta. Al contrario. Aúna y congrega. Arrels de un pasado que está más vivo que nunca gracias a pioneros y luchadores como ella…..

Gracias Cuchita Lluch por la recomendación. Eres la mejor embajadora de una tierra que tanto y tan bueno tiene que ofrecer y que queremos seguir compartiendo durante muchos años.


Located in the stables of a 16th-century castle.

Vicky’s story is, like so many others, yet another example of drive, challenges, effort and a long road to achieving a dream. Youth does not detract from her passion and the years add up to experience and know-how, without a doubt.

Sagunto surprised us. We had never before walked its cobblestone alleys or seen its vast and impressive castle. It is a stunning city that still preserves traces of its Roman and Arabic past.

Vicky found the perfect place to locate her launch center on the street leading up to the castle. The restaurant is housed in remodeled stables that maintain the essence, cool temperatures and austerity of a place where the experience is certain to be unique.

Arrels has received its first Repsol sun, a first recognition for the cooking of a young chef who breaks with the classic canons of earlier cities to bring us a courageous cuisine that looks toward the future and joins tradition with the avant-garde. Her versions of classic dishes revive generations and give you an even deeper understanding of the precious land where they originated.

The snacks arrive clean and delicate before the diner in a neutral display of wood and tableware, very in tune with the setting. Her version of tuna and onions, the Santa Pola caridean shrimp in white asparagus sauce, and the Almedijar cheese cream with almond dirt and arugula pesto open the menu. What’s fantastic about Vicky is that she goes beyond the primary nuances of the products, always adding little “shots” of crunch, acid and contrasts that complete and celebrate the dish in itself. “Please!” I beg her, never take the cheese cream off the menu! What a mouth-watering delicacy that unctuous and spicy mixture is!!

The zucchini flower, in my opinion, interrupts the lightness and fluidity of the menu, and is unnecessary. But it resumes its ascent with the roasted chicken jus with its crisp and the squid and dirty cuttlefish curry, which makes for a singular and incomparably nuanced stew. The hake melts on the fork and in your mouth, fresh and perfectly cooked, and the “d’espardenyà” royale (mix of eel and duck) with foie and pistachios is the perfect example of what the talk of the town will soon be about this young chef: perfect, balanced, with the foie crowning the royale to ease its intensity, and the pistachios once again providing the crunch and contrast. Bravo.

Citrus flavors prevail in the desserts, which complete and culminate a menu that is quite affordable given the quality and quantity served.

We saw Vicky at the Repsol suns gala, quickly and nimbly collecting her award with the urgency of a youth that doesn’t diminish, but rather unites and unifies. Arrels is of a past which is more alive than ever thanks to pioneers and fighters like her.

Thank you Cuchita Lluch for the recommendation. You are the best ambassador of a land that has so much good to offer that we want to continue sharing for many years.